En Verano reina
el esplendor del Fuego.
A través del
corazón, raíz de vida, morada del shen.
Generador de
todos los cambios del espíritu.
Fase del ser
completo.
Démosle cabida!
Esta estación es
la máxima expresión de la manifestación de la vida-fase yang.
El cuerpo está en su mayor expansión y
movimiento hacia afuera,
la energía debe consumirse, no acumularse.
Exteriorizar las vivencias, viajar, celebrar, estar más al aire libre son
infinitivos asociados al dinamismo y vitalidad, al color, al entusiasmo por la
vida.
Las comidas más
livianas, no muy cocinadas, coloridas y en menos cantidad: es fácil comer en
verano! Las frutas, los jugos, las verduras de hoja, pepino, mijo, queso de
soja(tofu), pescado, se llevan bien en esta estación.
El órgano asociado
al elemento Fuego es el Corazón, que controla la sangre y los vasos sanguíneos,
la mente, el espíritu y el pensamiento; allí vive el shen, que es el “alma
consciente”. se expresa en la cara, en los ojos y a través de la palabra
sincera.
La víscera es el
Intestino Delgado, el encargado de absorber la energía yang de los alimentos
que utiliza el corazón y regula la presión sanguínea. Allí radica el recuerdo
del camino ancestral del hombre.
Peeero, esto no
es todo. Hay otros dos sistemas vinculados al Fuego, con lo que en realidad
serían cuatro y no dos!. No tienen órganos asociados; pueden considerarse como
“aspectos fisiológicos”: el Pericardio, que protege al corazón y regula la
afluencia de sangre y secreciones sexuales, y el Triple Calentador, que entre
sus múltiples funciones mantiene la temperatura adecuada del cuerpo, y es, en
fin, el regulador del metabolismo. Casi nada!
El elemento Fuego
en armonía, crea un ambiente de calidez y amor.
La risa y el disfrute están al
alcance de todos nosotros,
éste es el momento! A celebrar!
Gracias Su Fraga!